Por si acaso quito los Cardo ya cargados y recojo la ropa del tenderete moteril. Dentro de la tienda voy preparando también las cosas y cargando la moto, tocara recoger todo rápido y de mala manera sino.
Para las 07:00 ya se van despertando el resto y la estampida sera inminente. Procedemos a recoger tienda y montar todo en la moto para escapar, tras dejar en recepción la típica tarjeta parcelaria.
Hoy es un gran día aunque empieza pasado por agua. Vamos camino del primer puerto de montaña y llueve que da gusto. Hacemos cima en el Col de Labouret y la cosa no cambia.
Seguimos camino de Jausiers para hacer el Col de la Bonette, supuestamente el mas alto de Europa asfaltado, aunque la cima da rodeo a la montaña. La subida empieza como es de esperar algo húmeda pero a medida que vamos ascendiendo el asfalto esta seco y podemos divertirnos mucho por esa carretera de montaña. En la parte final vamos detrás de unas custom que rozan constantemente con las ondulaciones del terreno.
En la cima, fotos de rigor y comentando las mejores jugadas.
La ruta continua sobre nuestros pasos ya que vamos al norte y pasar a Italia haria que nos perdiésemos unos puertos míticos.
Tras pasar por Jausiers de nuevo continuamos la ruta por la D-900, viendo por el camino el Fort de Tournoux.
Pasamos de nuevo por Jausiers camino del Col de Vars con una subida muy divertida donde como siempre el grupo se estira.
Allí justo coincidimos con una pareja catalana muy maja, que van también camino de Alemania, y con los que nos encontraríamos en el camino varias veces. Hablando con Pep, comentamos los itinerarios de cada grupo viendo que hay un puerto que no sabia, el Col Dagnelo que cruza a Italia.
Continuamos nuestro viaje camino del Col de Agnello con una buena carretera y muy divertida a medida que vamos ascendiendo. Las vistas son muy bonitas y el paisaje merece la pena ser contemplado. Según vamos llegando a la cima la niebla hace acto de presencia y el termómetro ya marca los 5º. Con cautela vamos subiendo hasta la cima donde hay una buena ventisca y algunos aventurados ciclistas.
Mientras bajamos, podemos observar la fauna local, los castores se dejan ver campando a sus anchas. Ya bajando de la Bonette vi uno en medio de la carretera que rápidamente se escabullo.
Parada tras parada, reanudamos un poco la marcha para subir uno de los puertos que te traslada a Marte por su curioso paisaje lunar, el Col de Izoard.
De camino se atraviesa el pueblo de Château Queyras con su imponente castillo.
Una bonita subida con pasada por un valle majestuoso y donde coincidimos con Pep en un mirador, las vistas del paisaje son increíbles y los Alpes no dejan de asombrarnos.
En el alto un monolito nos dice la altitud y donde estamos. Aprovechamos la parada para hacer un picoteo rápido y reponer fuerzas.
Seguimos camino de Briançon por valles preciosos y carreteras divertidas donde nos lo vamos pasando en grande.
Ya en nuestro destino toca buscar el camping y ver si hay suerte para coger un mobilehome. Tras el día pasado por agua que llevamos no estaría mal poder dormir bajo techo y no tener que montar la tienda...
Estamos de suerte y hay uno que aunque esta reservado al dia siguiente el gerente esta de acuerdo en dejárnoslo usar ya que para las nueve de la mañana estaremos fuera y todo recogido.
Y menos mal, ya que cinco minutos después de instalarnos cae una granizada de espanto y que nos hubiese jodido bien en la tienda de campaña.
La verdad es que es una satisfacción muy grande el dormir en una cama y con calefacción, que aunque estemos en Julio el tiempo no esta por la labor y hay una temperatura exterior de 10º.
Una ducha caliente que sabe a gloria bendita y unas cervezas hacen que el día termine mejor de lo esperado.
Agur la ostia!!!
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